Los medios de comunicación y los gobiernos tienden a centrar los problemas económicos en los EEUU, olvidándose intencionadamente de como la actual crisis mundial afecta especialmente a los que están en peores condiciones. Sin duda entre ellos están los que todavía viven bajo regimenes comunistas como Cuba.
Por eso resulta interesante leer el artículo de Óscar Espinasa publicado en eldiarioexterior.com Uno de los párrafos más interesantes dice:
Próximo a cumplirse 20 años de crisis económica, política y social, la situación se ha agravado en Cuba por el azote de los huracanes Ike y Gustav. La magnitud del golpe fue colosal; la mayor destrucción en la historia de la república. Aproximadamente, 500.000 viviendas dañadas total o parcialmente, cerca del 15% del maltrecho fondo habitacional; devastación del sistema electro-energético; pérdida de miles de hectáreas de cultivos, en particular plátano, cítricos, arroz y café; considerables afectaciones a la cría de aves y cerdos; cientos de escuelas, hospitales, industrias, centros deportivos y culturales, casas de curar tabaco y almacenes dañados. Las evaluaciones iniciales cuantifican las pérdidas en más de 5.000 millones de dólares, algo más del 10% del PIB
Y continua...
Actualmente, la infraestructura cubana está muy deteriorada por los 20 años de crisis y un proceso agudo de descapitalización, con tasas de inversión insuficientes para garantizar la reproducción simple en ramas económicas esenciales. Mientras, el crédito político disfrutado por las autoridades durante decenios se ha convertido en un mar de disgusto de una población que ha perdido la confianza. Un malestar que, de continuar en ascenso, pudiera desembocar en convulsiones sociales o en una estampida de personas desesperadas por alcanzar las costas de Estados Unidos, con imprevisibles consecuencias para las relaciones con esa nación.
En fin, que la lectura del artículo completo es muy recomendable.
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