En 2007 se homologaron 5.383 títulos de facultativos extranjeros, sólo 4.486 fueron admitidos en las facultades de Medicina

Las cifras, esas que tanto gustan a nuestros políticos, están claras, y nos demuestran, sin asomo de duda, que preferimos importar médicos a formarlos en nuestras universidades (en Baleares no, porque carece de facultad de Medicina y mucho me temo que así seguirá durante mucho tiempo), tanto es así que mientras en 2007 se homologaron 5.383 títulos de facultativos extranjeros, sólo 4.486 fueron admitidos en las facultades de Medicina, de los que un 15 por ciento no llegará a terminar a la carrera, por lo que, y a pesar de que la cifra de admitidos se amplió,el pasado curso, a 6.149, el número de licenciados que salen cada año esinsuficiente para cubrir las plazas MIR que oferta el Sistema Nacional de Salud. Mientras tanto, muchos de nuestros profesionales se van a otros países donde les ofrecen mejores sueldos y condiciones de trabajo; es decir, hemos gastado una cantidad ingente de dinero en formar especialistas para que otros países se aprovechen de ello. Y seguimos tan tranquilos, mirándonos el ombligo, contratando médicos extranjeros, enviando fuera a los nuestros y, por si no fuera suficiente, lanzando el mensaje, como ha hecho nuestro ínclito conseller Vicenç Thomàs, de que son unos privilegiados. Una política de lo más acertada.

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