Tupí, en aguas muy profundas en el océano Atlántico, en la región conocida como Cuenca de Santos y a unos 290 kilómetros del litoral, es el primer yacimiento que Brasil comienza a explotar en el llamado presal, un nuevo horizonte de exploración de hidrocarburos ubicado a unos 7.000 metros de profundidad y por debajo de una capa de sal de unos 2.000 metros.
La petrolera brasileña planea invertir cerca de 29.000 millones de dólares hasta 2013 para desarrollar sus yacimientos en el presal y su previsión es estar extrayendo en 2011 unos 219.000 barriles por día en la zona.
Ese volumen, según los planes de la petrolera, será elevado hasta 1,3 millones de barriles diarios en 2013 y hasta 1,8 millones en 2020, prácticamente lo que Brasil producía diariamente hasta el año pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario