Hasta ahora China a conseguido importantísimos éxitos, que han tendido como consecuencia la transformación del panorama económico mundial, convirtiéndose en la GRAN FÁBRICA del mundo.
El siguiente paso no puede ser otro que aspirar a convertirse en EL GRAN CEREBRO DEL MUNDO.
China ocupa hoy el primer lugar del mundo en la solicitud de patentes, y sólo en 2008 la cantidad de patentes concedidas a empresas chinas sobrepasó las ochocientas mil, si bien la mayoría de las patentes solicitadas no son de gran relevancia, sino tan sólo tecnologías de categoría media con un período de validez de diez años.
Resulta de una lógica aplastante que una vez alcanzado un objetivo, decida a ir por el siguiente. Sin embargo, convertirse en el gran cerebro del mundo, requiere algunas condiciones que hoy por hoy, es díficil observar en China. En concreto la democracia y el pensamiento libre.
A pesar de todo vale la pena leer el artículo que hoy se publica en el Foro España-China, en donde se señala que el sistema de propiedad industrial se ha vuelto más riguroso en el enorme y lejano país, desde hace unos años.
En en artículo se quejan de la actitud recelosa y no siempre límpia delas instituciones y empresas occidentales. Puede ser, sin embargo, es un elemento más que refuerza la idea de que un cerebro necesita más altas cotas de libertad.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario