Los hoteleros isleños acudieron ayer al Consolat de Mar con la pretensión de que el president Francesc Antich apremiara a las entidades financieras para que abrieran el grifo del crédito, pero fueron ellos los que finalmente recibieron una ligera reprimenda, ya que la conclusión de la reunión fue que son los empresarios turísticos los que no están ejecutando al ritmo necesario las reformas oportunas para mejorar sus establecimientos, e incluso se señaló que pueden darse casos en que las ayudas estatales obtenidas a través de los planes Renove y Future para realizar estas obras se estén empleando realmente para hacer frente a los gastos de funcionamiento de estas empresas.
Es posible que los hoteleros como cualquier otro tipo de empresariado necesite sentir el aliento de la competencia para iniciar el proceso de destructición-creativa, algo que los baleares no notan debido a las rígidas normativas propias.
La noticia es de diariodemallorca.es.
Y Manera tira la toalla tal como se puede ver en mallorcadiario.com. Cuando las propias ideas no han ido bien, y se está agotado, lo mejor es dar paso a otros.
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